Para todos, una taza
Los argentinos, uruguayos y paraguayos toman Mate, los ingleses Té, para los suizos Chocolate; pero nosotros en esta orilla del Caribe preferimos el Café.
El café bien caliente -dicen en la Maracaibo de 37 grados centígrados- quita el calor abrazador de la llamada de la tierra del sol amada.
Hay quienes aseguran que calma el dolor de cabeza. Existe la práctica generalizada en poblaciones rurales de colocar café en polvo en las heridas para detener el flujo de sangre, aunque algunos médicos lo desmienten.
Si hay que pasar despierto toda la noche estudiando para un examen “hay que llenar un termo de café”, record Guillermo quien aún no termina la universidad.
Algunos artistas pintan utilizando como pigmento los residuos de este grano. Y los poetas no dejan de inspirarse en los ojos café.
En la pequeña Venecia, las visitas se reciben con café. La bienvenida y la despedida se sella con el tinto. Así, cuando sembramos a un ser querido, hacemos rondas de café.
Se estima que en la Venezuela de casi 30 millones de habitantes, el consumo per cápita de café es de unos dos kilos al año. Es tan importante la bebida que forma parte de la cesta básica y está estimado su precio en 37,5 Bs el kilo.
El café está en salas, parques, teatros, no distingue clases sociales. El presidente Hugo Chávez, por ejemplo, toma café todo el tiempo aún cuando los médicos le llamen la atención.
Hecho en Venezuela
Siendo el café un rubro estratégico, nuestra marca, hecha en revolución se llama Café Venezuela.Una empresa de propiedad social, que sólo durante 2012, produjo 981,76 toneladas. Un 100% más, que el año 2010.
La red de distribución de Café Venezuela está a cargo, principalmente, de Mercados de Alimentos (Mercal) y la Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos (Pdval).
A los pies de Bolívar
La tradición venezolana de tomar café, solo o acompañado, encontró sitio en la reconstrucción integral de la Caracas bolivariana. Uno de los Café Venezuela más concurridos se encuentra en la esquina de Gradillas, justo al bajar de la Plaza Bolívar, “donde a diario acuden mil personas aproximadamente”, reseña la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
Así que en los establecimientos o ante los vendedores ambulantes, las caraqueñas y los caraqueños siguen disfrutando de un buen café y aunque muchos prefieren sentarse en una mesa, otros esperan que por una esquina retumbe el grito ¡¡¡Café calienteeeeee!!! para compartir una tacita junto a Bolívar.
Gobierno del Distrito Capital/Ola Bolivariana/Escuela Bolivariana del Poder Popular
@Prensa_ebpp
¡¡¡Café Calienteeeee!!! | Ola Bolivariana
No hay comentarios:
Publicar un comentario