Los jefes de Estado y representantes de los 33 países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) ratificaron este lunes su compromiso en continuar con la construcción de un bloque regional soberano e independiente que, por encima de las diferencias, se une para avanzar hacia el desarrollo sostenible de los países que la integran.
"Vamos construyendo una América Latina y el Caribe diversa pero unida en un espacio común de independencia y soberanía política, de control soberano de los recursos naturales para avanzar hacia el desarrollo sostenible, la integración regional y el enriquecimiento de nuestra cultura", expresó el presidente de Cuba, Raúl Castro, durante la Cumbre de la Celac, realizada en Santiago de Chile.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ratificó que la gran política de la Celac "impide que la intriga nos divida; no olvidemos aquella dolorosa advertencia de Bolívar: 'más hace un intrigante en un día que 100 hombres de bien en un mes', pero estoy persuadido de que en esta hora estelar de nuestra historia fracasarán quienes intenten desviarnos".
A través de una carta que envió a la Cumbre del grupo, el jefe de Estado venezolano enfatizó: "Prevalecerá, lo digo con Bolívar nuevamente 'el bien inestimable de la unión', que el monrroismo desaparecerá definitivamente como instrumento de opresión, dominación y desunión de este lado del mundo".
En el mensaje, leído por el vicepresidente venezolano Nicolás Maduro, el presidente Chávez expresó: "La gran política tiene en la Celac un sólido espacio para su realización, se ha puesto elocuentemente de manifiesto que nuestra América latinocaribeña es capaz de verse y pensarse a sí misma y al mundo con plena autonomía y actuar conjuntamente".
En la cita, Cuba recibió la presidencia Pro Témpore y se aprobó el cuarteto de la Celac, que quedó conformado por Haití, Chile, Cuba y Costa Rica. Asimismo, se selló el documento revisado sobre procedimientos para el funcionamiento orgánico del organismo y se resolvió que Ecuador asuma la presidencia Pro Témpore en el año 2015.
Igualmente, se aprobó la Declaración de Santiago de la Cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que consiste en un documento de 73 puntos avalado por los mandatarios y representantes de los 33 estados miembros de este bloque regional, el cual fue fundado en Caracas en diciembre de 2011.
A partir de esta jornada, la troika de la Celac pasará a conformar un cuarteto con la inclusión de Haití, en nombre de la Comunidad de los Estados Caribeños. Además, los jefes de Estado y de Gobierno dieron luz verde a un proyecto especial de cooperación entre la Celac y este país.
En el evento, además se rindió homenaje al presidente Hugo Chávez y a los exmandatarios Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil, y Felipe Calderón, de México, por su rol protagónico en los esfuerzos en la creación de la comunidad latinoamericana y caribeña.
En especial, los jefes de Estado, representantes y cancilleres reiteraron el deseo de los pueblos del continente por la pronta recuperación del líder de la Revolución Bolivariana, quien se halla en La Habana, Cuba, tras ser operado el pasado 11 de diciembre.
"El hermano que ha sembrado la solidaridad, como nunca habíamos visto en la historia de América Latina", enfatizó el presidente del Uruguay, José "Pepe" Mujica, al referirse al presidente Chávez y en consonancia con las manifestaciones de apoyo y solidaridad.
Alerta ante el imperialismo
En la Cumbre de Santiago, el presidente Raúl Castro insistió en la unidad y denunció a las empresas transnacionales de Estados Unidos que aspiran el control de los recursos energéticos, hídricos y minerales de América Latina.
Alertó que aunque existen avances en la región con respecto a independencia y soberanía, persisten amenazas de injerencia. "Las transnacionales, fundamentalmente norteamericanas, no renunciarán al control de recursos energéticos, hídricos y minerales estratégicos, en vía de agotamiento", advirtió el jefe de Estado.
El líder cubano recordó que el actual "orden económico internacional es injusto y excluyente, atrapado en una crisis global que por ahora no vislumbra solución".
En este sentido, el presidente uruguayo José "Pepe" Mujica resaltó que la región está actuando "sin el patrón del Norte" y "estamos empezando a ser patrones de nosotros mismos y estamos intentando agarrar fuerzas para construir un diálogo de igual a igual".
Mujica refirió que a pesar de que la región representa un tercio de la humanidad, existe otro tercio que está emergiendo en Oriente con una gran fuerza, en tanto el mundo se está organizando "nos guste o no nos guste, en gigantescas unidades y creo que eso anuncia, seguramente, más adelante, un grado de unidad del mundo que no podemos ni siquiera soñar los hijos de Estado Nacional".
El jefe de Estado uruguayo remarcó que está cambiando el desarrollo de la fuerza productiva, el impacto tecnológico y la ciencia mundiales, y agregó: "Nos está empujando la necesidad de defendernos. Todos instintivamente tenemos conciencia de que para ser fuertes nos tenemos que juntar y para que nuestros derechos pesen necesitamos andar juntos y cuanto más nos dividamos más débiles vamos a ser y más gobernados desde afuera".
Complementariedad
La construcción de la unidad regional debe ir acompañada de una política de complementariedad que le dé viabilidad a la justicia y a la cooperación, como base para el desarrollo de América Latina, planteó el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.
Como ejemplo de complementariedad, el mandatario citó la relación económica que su país tiene con Venezuela, nación con la cual se ha establecido un intercambio comercial de petróleo y alimentos.
Explicó que hace más de una década Venezuela vendía el petróleo a precios tan bajos que le era imposible hacer inversión en el campo, cuestión que se revirtió con la llegada de Hugo Chávez a la Presidencia y con los proyectos de complementariedad que estableció con diferentes naciones de América Central y del Sur.
El presidente de Haití, Michel Martelly, por su parte, señaló que "este destino en colectivo nos permitirá hacer de esta región (América Latina) un polo de crecimiento mundial y un polo de cambios concretos para nuestros pueblos".
Sostuvo que las metas necesarias para lograr una efectiva cooperación y crecimiento latinoamericano deben hacer hincapié en la solución de la pobreza, la educación, la protección ambiental y el uso de recursos naturales renovables.
"Nunca estaremos satisfechos de nuestro trabajo mientras haya gente que sufre, que llora, gente que muere de hambre y de enfermedades, porque no se les prestan los cuidados necesarios", reflexionó.
AVN/Escuela Bolivariana del Poder Popular
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