El ministro de la Presidencia de Bolivia, Juan Ramón Quintana, prometió al titular de Exteriores de España, José García-Margallo, que su país dará una solución “satisfactoria” al caso de Sabsa, filial boliviana de las empresas españolas Abertis y Aena, nacionalizada el pasado lunes.
En una conversación telefónica sostenida en la tarde de este martes ambos funcionarios abordaron el tema de las intervenciones que el Gobierno del presidente boliviano, Evo Morales, ha llevado a cabo y que afectan ya a tres compañías españolas.
Quintana reconoció que existen retrasos en la tramitación de los expedientes de, Iberdrola y Red Eléctrica Española, expropiadas en 2012, pero aseguró a García-Margallo que la voluntad del Ejecutivo de Morales es “acelerar” esos dos procesos y llegar a una “solución satisfactoria” en los tres casos.
La nacionalización de Sabsa, que gestionaba los tres mayores aeropuertos del país no sentó nada bien al Gobierno español, que calificó la medida como un “acto inamistoso” y prometió “replantearse el conjunto de las relaciones bilaterales”.
Sin embargo, el ministro boliviano defendió la decisión de su país, la cual, dijo, “favorece al Estado plurinacional” y señaló que las autoridades bolivianas han sido prudentes, porque dieron tiempo y opciones para que Sabsa cumpliese los compromisos de inversión contraídos, algo que no hizo y provocó la expropiación.
“Vamos a seguir siendo prudentes, no es hora de expresiones descorteses, inamistosas, hostiles”, aseguró y añadió que su Gobierno hará las valoraciones necesarias para compensar a las empresas españolas “con la mayor exactitud posible”.
Al hacer pública la decisión, el presidente Evo Morales explicó que se tomó después de no llegar a un acuerdo con los representantes de la Sabsa tras haber verificado el incumplimiento de inversiones comprometidas para el mejoramiento de los servicios y “una ganancia exorbitante a su favor”.
España ha reiterado en varias ocasiones que no cuestiona el derecho soberano de un país a nacionalizar empresas en sectores estratégicos, pero exige que se pague una indemnización justa por ello a la compañía afectada. Es precisamente este paso el que está pendiente con Iberdrola y Red Eléctrica Española.
XINHUA/Escuela Bolivariana del Poder Popular
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