El cortejo fúnebre parte este martes a las 8:00 am hacia el cementerio de Guarenas
Con un concierto de la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas y la distribución masiva de dos volúmenes que compilan parte de su obra, se rindió homenaje ayer al dramaturgo Rodolfo Santana, fallecido el pasado domingo 21 de octubre. El tributo tuvo lugar durante su velorio, realizado sobre las tablas del Teatro Nacional, en Caracas, como fue su voluntad, según apuntó el ministro para la Comunicación y la Información, Ernesto Villegas, en el programa de televisión Toda Venezuela.
Santana, figura destaca en el teatro y el cine, falleció el pasado domingo en la mañana a causa de la diabetes que padecía, complicada además con una afección pulmonar, información que confirmaron algunos allegados, entre ellos el presidente de la Fundación para la Cultura y las Artes del municipio Libertador, Freddy Ñañez, discípulo y amigo del dramaturgo.
En conversación con el Correo del Orinoco, el director ejecutivo de la Cinemateca Nacional, David Rodríguez, informó que los restos mortales de Rodolfo Santana Permanecerán en el Teatro Nacional hasta esta mañana a las 8:00 am, cuando finalmente parta el cortejo fúnebre hacia el Cementerio de Guarenas.
UN IMPRESCINDIBLE
“Rodolfo (Santana) nos dejó un legado en su obra dramatúrgica y cinematográfica. Ahí está su ideario y su pensamiento. Yo creo que un gran homenaje a Rodolfo sería estudiar bien su obra y lograr que las ideas que nos dejó como proyecto se realicen”, consideró Xavier Sarabia, presidente de la Cinemateca Nacional.
El servidor público calificó a Santana como un seguidor de Bertol Brecht, no solo en lo referente a la dramaturgia, sino también en cuanto al pensamiento comprometido. “En términos brechtianos Rodolfo era un imprescindible y la reflexión tiene que girar en torno a su compromiso como intelectual y a las tareas que nos deja por hacer”, apuntó.
Con la muerte de Rodolfo Santana“uno siente una gran orfandad, una orfandad en todos los sentidos, en el sentido artístico, porque se va una de las voces creo yo, más importantes e influyentes de la última mitad del siglo XX, no solo en la dramaturgia sino desde el punto de vista del pensamiento crítico, la identidad nacional, de las expectativas por la construcción de un mejor destino colectivo…
Una voz influyente en esa angustia de lo político y de lo estético y de lo ético”, declaró por su parte el presidente de Fundarte Freddy Ñáñez.
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