Este fin de semana, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, sorprendió a la región al anunciar que en junio firmará un acuerdo de cooperación con la OTAN, como primer paso a su integración a la organización militar controlada por EE.UU. La OTAN confirmó la "cooperación" pero descartó el ingreso "por razones geográficas"."Este mes que comienza, la OTAN va a suscribir un acuerdo con el Ministerio de Defensa colombiano, para iniciar un proceso de acercamiento, de cooperación, con miras también a ingresar a esa organización", expresó Santos el sábado 1º de junio, durante un acto de ascenso a integrantes de la Armada realizado en Bogotá.
El controvertido mandatario, que ya estaba siendo criticado por recibir en la sede del gobierno al candidato derrotado en las elecciones presidenciales de Venezuela, Henrique Capriles -quien es el responsable por el asesinato de 11 personas y continúa desconociendo los poderes institucionales del vecino país-, ha subrayado que Colombia tiene derecho a "pensar en grande" y a tener razones "para ser los mejores ya no de la región, sino del mundo entero".
Militarismo o integración
Sus dichos y hechos, producidos días después de la visita al país del vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, implican un claro distanciamiento de los procesos de unidad latinoamericana expresados en iniciativas como la Unasur y la CELAC.
Según diversos analistas, sus declaraciones apuntan a "reciclar" las fuerzas militares que pudieran quedar "ociosas" en caso de continuar avanzando los acuerdos de paz con las FARC. En tal caso, el eventual ingreso a la OTAN podría resultar una cobertura para el mantenimiento de una fuerza militar importante en Colombia, conveniente para los intereses imperiales en la región. Recordemos que, con la excusa del combate a las FARC, a los paramilitares y a los narcotraficantes, los EE.UU han establecido bases militares en Colombia. Según el Observatorio Latinoamericano de Geopolítica, las posiciones de EE.UU. en el país suramericano, entre las efectivamente existentes y las proyectadas con los acuerdos de agosto de 2009 y octubre de 2010, ascienden al número de once: Tres Esquinas, Larandía, Málaga, Apiay, Toleimada, Marandúa, Palanquero, Caño Limón, Cartagena, Malambo y Riohacha.
El ministro de Defensa colombiano, Juan Carlos Pinzón, defendió la aspiración de pertenecer a la OTAN explicando que allí se encuentran “los grandes estándares de legitimidad y de buenas prácticas en materia militar”. Sin embargo, no hizo mención a las consecuencias de las acciones militares de la organización en todo el mundo, entre las que frecuentemente se encuentran víctimas civiles en diversos países. Un ejemplo de esto es el bombardeo realizado en abril de este año en Afganistán, que dejó un saldo de 10 niños y una mujer asesinados, además de varias otras personas heridas.
La OTAN envía un mapa
Este lunes, voceros de la OTAN aseguraron que la alianza militar está interesada en seguir trabajando en acuerdos de "cooperación con Colombia", pero aclaró que el país latinoamericano "no cumple con los criterios geográficos" para ingresar a ella. Como indica su nombre, la OTAN es la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
Según informó la agencia española EFE, las fuentes expresaron que "no hay planes inmediatos para establecer una asociación formal entre la Alianza y Colombia", aunque se está explorando "la posibilidad de llevar a cabo actividades específicas conjuntas".
AlbaTv/Escuela Bolivariana del Poder Popular
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