VC 2020 (primera parte): Visión Conjunta del Departamento de Defensa gringo para el año 2020

Por considerarlo de gran interés, presentamos a continuación la traducción al castellano del documento Visión Conjunta 2020 [Joint Vision 2020] publicado por la Dirección de Políticas y Planes Estratégicos del Ejército de los EEUU en junio de 2000 (Defense Technical Information Center). Por lo extenso lo dividimos en dos partes.



Comentario a la traducción: Traducido para Rebelión por Jorge Capelán 

El propósito de Visión Conjunta 2020 (VC 2020), "…es el de describir en términos generales el talento humano… y las capacidades operativas que se requeriran para que la fuerza conjunta sea exitosa…" en las inmediaciones del año 2020. 

Cabe aclarar que, VC 2020 no es un plan para el futuro, sino más bien el diseño de un proceso de reacomodación permanente de la doctrina militar de los EEUU: VC 2020 es a su vez heredera de VC 2010 (1995) e incluye un plan de implementación comenzado a fines de la década de los 90s. Es de presumir que los presupuestos militares astronómicos aprobados recientemente por los EEUU (que recuperan los niveles de gasto militar de la guerra fría), no hagan sino acelerar la implementación de VC 2020. 

Según los autores, "…el centro de atención de este documento es el tercer elemento de nuestro enfoque estratégico - la necesidad de prepararnos ya para un futuro incierto." 

Queremos advertir a nuestros lectores, que el análisis de este tipo de documentos de circulación pública no pueden de ninguna manera sustituir un análisis serio, teóricamente informado y fundamentado, de las contradicciones económicas y sociopolíticas del imperio, así como de su accionar político-militar tanto en el presente como en el pasado. Estos documentos son más bien una mezcla de directrices y visiones estratégicas con argumentos ideológicos para el consumo interno -y también externo- y la justificación de gastos en el sector de la defensa. 

Sin embargo, una lectura atenta del mismo dejará entrever, tanto una serie de coincidencias entre sus planteamientos y la ofensiva imperial actual desatada a escala planetaria, como una constatación de la forma en que los Estados Unidos ven su propia dominación: "Los intereses globales y las responsablilidades de los Estados Unidos persistirán, y no hay ninguna indicación de que las amenazas hacia esos intereses o a los de nuestros aliados vayan a desaparecer. Los conceptos estratégicos de fuerza decisiva, proyección de poder, presencia de ultramar y agilidad estratégica continuarán rigiendo nuestros esfuerzos para cumplir con esas responsabilidades y enfrentar los retos del futuro." 

Según el documento, en el mundo del año 2020: "Primero, los Estados Unidos continuarán teniendo intereses globales y estarán comprometidos con una serie de actores regionales […] Segundo, los adversarios potenciales tendrán acceso a la base global comercial e industrial, así como en general a la misma tecnología que las de las fuerzas armadas de los EEUU […] Tercero, deberíamos esperar que los adversarios potenciales se adapten a medida que evolucionan nuestras capacidades." 

Una preocupación recurrente en la literatura militar publicada por el ejército estadounidense en los últimos años ha sido la de las 'amenazas asimétricas': "El potencial de tales enfoques asimétricos es tal vez el peligro más serio que los EEUU enfrentan en el futuro inmediato" 

Según Metz & Johnson, "En el ámbito de los asuntos militares y la seguridad nacional, la asimetría es el actuar, organizar y pensar diferente que el oponente en orden de maximizar la ventaja propia, explotar las debilidades del oponente, lograr la iniciativa o ganar una mayor libertad de acción. Puede ser político-estratégica, militar- estratégica, operativa, o una combinación de esos elementos. Puede implicar diferentes métodos, tecnologías, valores, organizaciones, perspectivas de tiempo, o alguna combinación de esos elementos. Puede ser de corto plazo o de largo plazo. Puede ser deliberada o por omisión. Puede ser discreta o llevada a cabo en conjunto con enfoques simétricos. Puede tener dimensiones, tanto sicológicas, como físicas." 

Es importante resaltar que, además de encajar en un cuadro de 'terrorismo' y 'amenazas irregulares,' esta definición es tan amplia que se adapta perfectamente a la estrategia de la actual ofensiva imperial a nivel mundial en la que el enemigo puede ser, en principio, culaquier cosa. 

Para contrarrestar las futuras amenazas al poder imperial, el ejército de los EEUU se propone alcanzar ladominación de espectro total, que consiste en una concepción en la que -como lo veremos más adelante- se desdibujan las fronteras entre amigos y enemigos, entre pueblos y gobiernos, entre aliados y mercenarios, y en la que se da espacio para la participación de 'Organizaciones No-Gubernamentales.' 

Según el documento, la dominación de espectro total es "…la capacidad de las fuerzas de los EEUU, operandounilateralmente o en combinación con aliados multinacionales o fuerzas inter-agencias, de derrotar acualquier adversario y controlar cualquier situación a lo largo de todo el espectro de operaciones militares." 

VC 2020 explica que: "Las operaciones de espectro total incluyen el mantenimiento de una postura de disuación estratégica. Incluyen acción en el teatro de operaciones y actividades de presencia. Incluyen el conflicto con empleo de fuerzas estratégicas y armas de destrucción masiva, guerras de teatro principal, conflictos regionales y contingencias de menor escala. También incluye aquellas situaciones ambiguas que se ubican entre la paz y la guerra, tales como las operaciones para mantener y hacer cumplir la paz, así como operaciones no-combativas de ayuda humanitaria y el apoyo a las autoridades locales." 

Asimismo, el documento advierte que la lucha contra las amenazas no estará libre de peligros: "… La fuerza conjunta del año 2020 buscará crear un 'desbalance de fricción' a su favor usando las capacidades divisadas por este documento, pero las fuentes fundamentales de fricción no pueden ser eliminadas. Ganaremos - pero no deberíamos esperar que la guerra en el futuro vaya a ser fácil o sin sangre." 

Acerca de las 'fuentes de fricción,' el documento no explica demasiado. En este sentido, son conocidas las contradicciones actuales del imperialismo a nivel planetario, que van desde una economía no competitiva, con un fuerte desbalance en los términos de intercambio, hasta la necesidad de asegurarse el acceso a los recursos naturales a nivel mundial, pasando por la agudización de la polarización socioeconómica tanto en las sociedades del centro como en las de la periferia y la crisis ecológica. Es lógico que el documento no quiera adentrarse más en esos aspectos; sin embargo, las explicaciones de esta 'fricción' basadas en 'guerras de civilizaciones,' 'actitudes reactivas' al cambio, y 'estados fallidos' del tercer mundo, tan comunes en el discurso globalizador actual, son recurrentes en los análisis militares estadounidenses. 

Más importante que el análisis que el ejército de los EEUU pueda hacer acerca de las fuentes de la fricción, sin embargo, es su planteamiento de crear un 'desbalance de fricción' a su favor por lo que esto implica para las víctimas del guerrerismo estadounidense. Esta noción de un desbalance de fricción favorable no implica otra cosa que una extensión, generalización y profundización del ya conocido conflicto de 'baja' intensidad aplicado por los EEUU desde la década de los 80s y que hoy se generalizaría al conjunto de las relaciones mundiales, aderezado con los medios militares de intimidación nuclear, biológica, etc. 

Según Metz: "El tipo último de combatientes del conflicto armado del Siglo XXI serán probablemente los de carácter postmoderno y no- estatal. Éstos consistirán de redes difusas de todo un espectro de organizaciones no-estatales, algunos de orientación político o ideológica, otros en busca de ganancias." 

La guerra imperialista del Siglo XXI, en los términos en los que la plantea VC 2020, requiere de la conducción de operaciones conjuntas: "Este enfoque integrado descansa en el uso de todas las herramientas del estadista para alcanzar nuestros objetivos nacionales,unilateralmente cuando sea necesario, al tiempo que en el hacer un uso óptimo de las habilidades y los recursos provistos por las fuerzas militares multinacionales, lasorganizaciones regionales e internacionales, lasorganizaciones no- gubernamentales y lasorganizaciones voluntarias privadas cuando sea posible. La participación de la fuerza conjunta en operaciones deapoyo a las autoridades civiles, también aumentará en importancia debido a las amenazas emergentes al territorio de los EEUU, tales como el terrorismo y las armas de destrucción masiva." 

Además de las referencias a los mecanismos de presión y chantaje políticos a nivel interestatal, así como a la acción unilateral 'cuando sea necesario,' la conducción de 'operaciones conjuntas' incluye, además de organismos y alianzas regionales hasta fuerzas mercenarias de todo tipo, empresas 'privadas' como las utilizadas hoy en día en el marco del Plan Colombia, ONGs y 'organizaciones voluntarias privadas.' Una referencia directa a la dimensión contrainsurgente de la estrategia es el 'apoyo a las autoridades civiles.' 

Para asegurarse la preeminencia 'a lo largo de todo el espectro de operaciones militares,' VC 2020 descansa en la aplicación de los conceptos de maniobra dominante, combate de presición, logística focalizada, protección de dimensión total, operaciones informacionales, y el comando y control conjuntos. 
Según el documento, la Maniobra Dominante consistiría en "acciones conjuntas aéreas, terrestres, marítimas, anfibibias, de operaciones especiales y de fuerzas espaciales ampliamente dispersas, capaces de escalar y acumular fuerzas masivamente y los efectos del fuego según éste se requiera para operaciones, ya sea de combate o no-combativas, asegurarán la ventaja… a través de la aplicación de la información, la decepción, el combate y las capacidades de movilidad y contra-movilidad." 

El Combate de Precisión es definido como "la habilidad de las fuerzas conjuntas de localizar, vigilar, diferenciar y rastrear objetivos o blancos; seleccionar, organizar, y usar los sistemas correctos; generar los efectos deseados; evaluar los resultados; y re-entrar en combate con la velocidad y el ritmo operativo abrumador requeridos, a lo largo de todo el espectro de operaciones militares." 
La Logística Focalizada sería "la habilidad de proveeer a la fuerza conjunta con el adecuado personal, equipamiento y provisiones en el lugar adecuado, en el momento adecuado, en la cantidad adecuada, en todo el espectro de las operaciones militares… a través de unsistema de información en tiempo real y basado en redes que provea de una visibilidad total de los recursos… vinculando efectivamente al personal operativo y logístico en todos los Servicios y agencias de apoyo… a través de innovaciones transformativas a las organizaciones y los procesos..." 

La Protección de Dimensión Total sería lograda "a través de la selección adecuada y la aplicación de medidas multicapas activas y pasivas, en los dominios del aire, la tierra, el mar, el espacio y la información a lo largo de todo el espectro de las operaciones militares con un nivel aceptable de riesgo." 

Las Operaciones Informacionales serían "aquellasacciones emprendidas para afectar la información y los sistemas de información al tiempo que se defiende la información y los sitemas de información propios… Las operaciones informacionales también deben incluir acciones tomadas en una situación no-combativa o ambigua para proteger la información propia y los sistemas de información, así como aquellas tomadas para influenciar la información de los blancos y sus sistemas de información." De la lectura de VC 2020 se desprende que este tipo de acciones abarcarían desde la piratería informática hasta lo que en el ejército de los EEUU se conoce como 'Operaciones Psicológicas.' 

Por último, el Comando y Control Conjuntosimplicarían "el ejercicio de la autoridad y la dirección por una comandancia debidamente designada sobre las fuerzas asignadas y agregadas en el cumplimiento de la misión." 

En resúmen, estos elementos representan una combianción de tecnologías de la información con los desarollos más eficientemente letales de la industria armamentista y las técnicas de producción just- in-timeaplicadas actualmente en la producción capitalista. Cabe especular que, a pesar la retórica triunfal, la aplicación de estos métodos de 'producción' en el terreno de la logística militar podría estar sujeta a las mismas debilidades del sistema en el mundo real de la economía capitalista: Un fallo relativamente pequeño en un eslabón de la cadena paraliza el flujo de las mercancías en toda su extensión. Por otro lado, la dependencia de agentes extra-militares que pueden perseguir agendas propias, es otro factor que añade a las dificultades de controlar las fuerzas militares del imperio. 

Para finalizar, la lectura de VC 2020 no es precisamente una experiencia literaria agradable: la mezcla de la tecno-jerga globalizadora, cibernética y postmodernizante con la de los manuales cuarteleros, sumada al necesario uso de eufemismos para el consumo interno y externo hacen de la lectura del documento una tarea ardua, pero que aporta elementos para entender el accionar militar del imperio. 
Jorge Capelán 

Notas: 

i) El documento explica que: "Visión Conjunta 2010 ha tenido un profundo impacto en el desarrollo de las capacidades militares de los EEUU. Al describir esas capacidades necesarias para lograr el éxito en el año 2010, pusimos en movimiento tres esfuerzos importantes. Primero, VC 2010 estableció un marco común y un lenguaje para que los Servicios desarrollen sus contribuciones únicas a la fuerza conjunta. Segundo, creamos un proceso para la conducción de la experimentación conjunta y el capacitación para validar las ideas en la práctica. Finalmente, iniciamos un proceso para administrar la transformación de la doctrina, la organización, el capacitación, el material, el liderazgo y la educación, el personal, y las facilidades necesarias para hacer realidad de la visión. Visión Conjunta 2020 se parte de esa base de éxito y mantendrá el impulso de esos procesos." 

ii) Steven Metz y Douglas V. Johnson II: ASYMMETRY AND U.S. MILITARY STRATEGY: DEFINITION, BACKGROUND, AND STRATEGIC CONCEPTS, enero 2001, Strategic Studies Institute, U.S. Army War College. Según los autores, el concepto de 'Guerra Asimétrica' es parte integrante de todo conflicto militar, y su teorización en el terreno militar puede trazarse hasta los escritos de Sun Tzu. En la literatura militar de los EEUU, 'La mención explícita de la asimetría apareció primero en Doctrina Conjunta [Joint Doctrine] en 1995.' 

iii) Por ejemplo: Kennedy, Claudia (Teniente-General del Ejército de los EEUU): THE AGE OF REVOLUTIONS, marzo 1998, Strategic Studies Institute, U.S. Army War College; Metz, Steven: AMERICA IN THE THIRD WORLD: STRATEGIC ALTERNATIVES AND MILITARY IMPLICATIONS, mayo 1994, Strategic Studies Institute, U.S. Army War College; Metz, Steven: ARMED CONFLICT IN THE 21st CENTURY: THE INFORMATION REVOLUTION AND POST-MODERN WARFARE, abril 2000, Strategic Studies Institute, U.S. Army War College 

iv) Ver Metz, Steven: ARMED CONFLICT IN THE 21st CENTURY: THE INFORMATION REVOLUTION AND POST-MODERN WARFARE, abril 2000, Strategic Studies Institute, U.S. Army War College. 

Visión Conjunta 2020:
Las Nuevas Guerras del Imperio
Documento del Ejército de los EEUU
I parte


1. Introducción 

El ejército de los EEUU hoy es una fuerza de hombres y mujeres capacitados a la perfección que estan dispuestos a entregar como resultado la victoria para nuestra nación. Como apoyo a los objetivos de nuestra Estrategia de Seguridad Nacional, es usado rutinariamente para dar forma al entorno de la seguridad internacional y permanece en disposición de responder en toda la gama de operaciones militares potenciales. Pero el centro de atención de este documento es el tercer elemento de nuestro enfoque estratégico - la necesidad de prepararnos ya para un futuro incierto. 

Visión Conjunta 2020 se basa en y extiende el marco conceptual establecido por Visión Conjunta 2010 para guiar la continua transformación de las Fuerzas Armadas de América. El propósito primordial de aquellas fuerzas ha sido y será el luchar y ganar las guerras de la Nación. El objetivo general de la transformación descrita en este documento es la creación de una fuerza que sea dominante en todo el espectro de las operaciones militares - persuasiva en la paz, decisiva en la guerra, superior en cualquier tipo de conflicto. 

En el año 2020, la nación se enfrentará a un amplio espectro de intereses, oportunidad y retos y ésto requerirá de un ejército que pueda ganar guerras y a la vez contribuir a la paz. Los intereses globales y las responsablilidades de los Estados Unidos persistirán, y no hay ninguna indicación de que las amenazas hacia esos intereses o a los de nuestros aliados vayan a desaparecer. Los conceptos estratégicos de fuerza decisiva, proyección de poder, presencia de ultramar y agilidad estratégica continuarán rigiendo nuestros esfuerzos para cumplir con esas responsabilidades y enfrentar los retos del futuro. Este documento describe los conceptos operativos necesarios para hacerlo. 

Si nuestras Fuerzas Armadas van a ser más rápidas, más letales, y más precisas en el 2020 de lo que son hoy en día, debemos continuar invirtiendo en y desarrollando nuevas capacidades militares. Esta visión describe la continua transformación es esas nuevas capacidadas. Como se explicó por primera vez en VC2010, y dependiendo de la realización del potencial de la revolución de la información, las capacidades de hoy en cuanto a maniobra, ataque, logística y protección se convertirán en maniobra dominante, combate de precisión, logística focalizada, y protección de dimensión total. 

La fuerza conjunta, dada su flexibilidad y capacidad de respuesta, continuará siendo la clave del éxito operativo en el futuro. La integración de las competencias fundamentales que proveen los Servicios individuales es esencial para el equipo conjunto, y el empleo de las capacidades de la Fuerza Total (activos, reservistas, guardia, y miembros civiles) aumentan el número de opciones a disposición del comandante y complica las elecciones de nuestros oponentes. Para construir la fuerza más efectiva para 2020, debemos estar totalmente integrados: intelectual, operacional, organizativa, doctrinaria y técnicamente. 

La visión se centra en la fuerza conjunta en el año 2020. Esa fecha define más bien un enfoque analítico general que un estimado definitivo o un plazo. El documento no describe medidas para contrarrestar amenazas específicas ni enumera los sistemas de armamento, comunicación o de otro tipo que desarrollaremos o adquiriremos. Más bien, su propósito es el de describir en términos generales el talento humano -la fuerza profesional, bien capacitada y en disposición combativa- y las capacidades operativas que se requeriran para que la fuerza conjunta sea exitosa a lo largo de todo el espectro de operaciones militares y llevar a cabo sus misiones en el año 2020 y más allá de éste. Al describir esas capacidades, la visión provee un vector para el comprensivo programa de amplio espectro de ejercicios y experimentación que está siendo conducido por los Servicios y los comandos combatientes y para la continua evolución de la fuerza conjunta. Basado en el programa de implementación de la fuerza conjunta, muchas capacidades serán operativas bastante antes del año 2020, mientras que otras continuarán siendo exploradas y desarrolladas a través de los ejercicios y la experimentación. 

Esta visión se enfoca en general en la dominación de espectro total - lograda a través de la aplicación interdependiente de la maniobra dominante, el combate de precisión, la logística focalizada, y una protección en todas las dimensiones. El lograr ese objetivo requiere el ir agregando continuamente nueva tecnología y modernización, así como el reemplazo de los equipos. Sin embargo, la superioridad material por sí sola no es suficiente. De mayor importancia es el desarrollo de una doctrina, organización, capacitación y educación, líderes, y gente que puedan sacar ventaja efectivamente de la tecnología. 

La evolución de esos elementos a lo largo de las dos próximas décadas será fuertemente influenciado por dos factores. Primero, el continuo desarrollo y proliferración de tecnologías de la información que cambien sustancialmente la conducción de las operaciones militares. Esos cambios en el entorno de la información hacen de esta un posibilitador clave de la transformación de las capacidades operativas de la fuerza conjunta y de la evolución del comando y control conjuntos. Segundo, las Fuerzas Armadas de los EEUU continuarán dependiendo de su capacidad de innovación intelectual y técnica. El ritmo del cambio tecnológico, especialmente a medida que dé impulso a los cambios en el entorno estratégico, le dará mucha importancia a nuestra capacidad de desarrollar la innovación en nuestra gente y organizaciones en todo el espectro de las operaciones conjuntas. La visión de conjunto de las capacidades que necesitaremos en el año 2020, tales y como han sido presentadas más arriba, descansa en nuestra capacidad de valorar el contexto estratégico en el que operan nuestras fuerzas. 

2. Contexto Estratégico 

Tres aspectos del mundo del año 2020 tendrán implicaciones significativas para las Fuerzas Armadas de los EEUU. Primero, los Estados Unidos continuarán teniendo intereses globales y estarán comprometidos con una serie de actores regionales. 
El transporte, las comunicaciones y las tecnologías de la información continuarán evolucionando y alimentando la expansión de los lazos económicos y la conciencia acerca de los eventos internacionales. Nuestra seguridad e intereses económicos, así como nuestros valores políticos, darán el ímpetu para nuestros compromisos con nuestros socios a nivel internacional. La fuerza conjunta 2020 debe estar preparada para "ganar" en todo el espectro de las operaciones militares en cualquier lugar del mundo, para operar con fuerzas multinacionales, y para coordinar operaciones militares, según sea necesario, con agencias gubernamentales y con organizaciones internacionales. 

Segundo, los adversarios potenciales tendrán acceso a la base global comercial e industrial, así como en general a la misma tecnología que las de las fuerzas armadas de los EEUU. No necesariamente tendremos una amplia ventaja tecnológica sobre nuestros adversarios en todas las áreas. Todo el incremento de la disponibilidad de satélites comerciales, comunicaciones digitales, y la Internet pública le dan a nuestros adversarios nuevas capacidades a un costo relativamente bajo. No deberíamos esperar que nuestros enemigos en el año 2020 vayan a luchar estrictamente con herramientas de la "edad industrial." Por lo tanto, nuestra ventaja debe venir de los líderes, de la gente, de la doctrina, de las organizaciones y de la capacitación que nos permitan sacarle partido a la tecnología para lograr una efectividad superior en la guerra. 

Tercero, deberíamos esperar que los adversarios potenciales se adapten a medida que evolucionan nuestras capacidades. Hoy tenemos capacidades de combate superiores y una capacidad nuclear de disuación efefctiva, pero este balance militar favorable no es estático. Frente a la fortaleza de tales capacidades, el atractivo de los enfoques asimétricos en el desarrollo de capacidades focalizadas o de nicho aumentará. Al desarrollar y utilizar enfoques que eviten las fortalezas de los EEUU y exploten sus vulnerabilidades potenciales usando métodos de operación significativamente diferentes, los adversarios intentarán crear condiciones que de manera efectiva retarden, impidan o contrarresten la aplicaciones de las capacidades militares de los EEUU. 

El potencial de tales enfoques asimétricos es tal vez el peligro más serio que los EEUU enfrentan en el futuro inmediato - y este peligro incluye los misiles balísticos de largo alcance y otras amenazas directas a los ciudadanos y el territorio de los EEUU. Los métodos asimétricos y los objetivos de un adversario a menudo son mucho más importantes que el desbalance tecnológico relativo, y el impacto psicológico de una ataque, de lejos podría superar el daño físico real inflingido. Un adversario puede intentar alcanzar una ventaja asimétrica en el nivel táctico, operativo o estratégico identificando vulnerabilidades claves y diseñando conceptos asimétricos y capacidades para atacar o explotarlos. Para complicar las cosas, nuestros adversarios pueden intentar una combinación de asimetrías, o los Estados Unidos podrían enfrentar a un número de adversarios que, combinados, podrían crear una amenaza asimétrica. Estas amenazas asimétricas son dinámicas y estan sujetas a cambios, y las Fuerzas Armadas de los EEUU deben mantener las capacidades necesarias para disuadir, defenderse de y derrotar a cualquier adversario que elija tal estrategia. Para enfrentar los retos del entorno estratégico en el año 2020, la fuerza conjunta debe ser capaz de lograr la dominación de espectro total. 

3. LA DOMINACIÓN DE ESPECTRO TOTAL 


El objetivo último de nuestra fuerza militar es el de alcanzar los objetivos trazados por las Autoridades de la Comandancia Nacional. Para la fuerza conjunta del futuro, esta meta será lograda a través de la dominación de espectro total - la capacidad de las fuerzas de los EEUU, operando unilateralmente o en combinación con aliados multinacionales o fuerzas inter-agencias, de derrotar a cualquier adversario y controlar cualquier situación a lo largo de todo el espectro de operaciones militares. 

Las operaciones de espectro total incluyen el mantenimiento de una postura de disuación estratégica. Incluyen acción en el teatro de operaciones y actividades de presencia. Incluyen el conflicto con empleo de fuerzas estratégicas y armas de destrucción masiva, guerras de teatro principal, conflictos regionales y contingencias de menor escala. También incluye aquellas situaciones ambiguas que se ubican entre la paz y la guerra, tales como las operaciones para mantener y hacer cumplir la paz, así como operaciones no-combativas de ayuda humanitaria y el apoyo a las autoridades locales. 

La etiqueta de dominación de espectro completo implica que las fuerzas de los EEUU sean capaces de conducir operaciones rápida, sostenida y sincronizadamente con combinaciones de fuerzas disñadas a la medida para situaciones específicas y con acceso a y libertad de operar en todos los dominios - en el espacio, mar, aire, tierra, y en la información. Adicionalmente, dada la naturaleza global de nuestros intereses y obligaciones, los Estados Unidos deben mantener sus fuerzas de presencia en ultramar y la capacidad de proyectar poder rápidamente por todo el mundo en orden de lograr la dominación de espectro total. 

El lograr la dominación de espectro total significa que la fuerza conjunta cumplirá con su objetivo primordial - la victoria en la guerra, así como el tener éxito en todo el espectro de las operaciones, pero eso no significa que ganaremos sin costo o dificultades. Los conflictos resultan en bajas a pesar de nuestros mejores esfuerzos por minimizar su número, y continuarán haciéndolo aún cuando las fuerzas hayan logrado la dominación de espectro total. La fuerza conjunta del año 2020 buscará crear un "desbalance de fricción" a su favor usando las capacidades divisadas por este documento, pero las fuentes fundamentales de fricción no pueden ser eliminadas. Ganaremos - pero no deberíamos esperar que la guerra en el futuro vaya a ser fácil o sin sangre. 

El requerimiento de operaciones globales, la capacidad de contrarrestar adversarios que poseen armas de destrucción masiva, y la necesidad de dar forma a situaciones ambiguas en la parte más baja del espectro de operaciones presentará retos especiales en el camino por lograr la dominación de espectro total. Por lo tanto, el proceso de crear la fuerza conjunta del futuro debe ser flexible - el reaccionar a los cambios en el entorno estratégico y las adaptaciones de los enemigos potenciales, el sacar ventaja de las nuevas tecnologías, y el tomar en cuenta las variaciones en el ritmo del cambio. La fuente de esa flexibilidad es la sinergia de las competencias centrales de los Servicios individuales, integrados en el equipo de la fuerza conjunta. Estos retos requerirán de una Fuerza Total compuesta de gente bien educada, motivada, y competente que se puedan adaptar a las muchas demandas de las futuras misiones conjuntas. La transformación de la fuerza conjunta para lograr la dominación de espectro total descansa sobre la superioridad informacional como un posibilitador clave y sobre nuestra capacidad de innovación. 

SUPERIORIDAD INFORMACIONAL 


La información, su procesamiento y las redes de comunicaciones estan en el centro de cada actividad militar. A lo largo de la historia, los líderes militares han visto a la superioridad en la información como el posibilitador clave de la victoria. Sin embargo, la actual "revolución de la información" está creando, no sólo un cambio cuantitativo, sino uno cualitativo en el entorno informacional que para el año 2020 resultará en profundos cambios en la conducción de las operaciones militares. De hecho, los avances en las capacidades informacionales están teniendo lugar tan rápidamente que existe el riesgo de que se sobrepase nuestra capacidad de capturar ideas, formular conceptos operacionales y desarrollar la capacidad de evaluar los resultados. Mientras que el objetivo de lograr la superioridad informacional no cambiará, la naturaleza, el alcance, y las "reglas" de la búsqueda estan cambiando radicalmente. 

El cambio cualitativo en el ámbito de a información extiende las bases conceptuales de la superioridad informacional más allá de la mera acumulación de más, o aún de mejor información. La palabra "superioridad" implica un estado o condición de desbalance a favor de uno mismo. La superioridad informacional es de naturaleza transitoria y debe de ser creada y mantenida por las fuerzas conjuntas a través de la conducción de operaciones informacionales. Sin embargo, la creación de la superioridad informacional no es un fin en sí misma. 

La superioridad informacional provee a la fuerza conjunta de una ventaja competitiva sólo cuando se traduce efectivamente en un conocimiento y una toma de decisiones superiores. La fuerza conjunta debe ser capaz de sacar ventaja de una información superior convertida en conocimiento superior para lograr la "superioridad en la toma de decisiones" - mejores decisiones logradas e implementadas más rápidamente de lo que un oponente pueda reaccionar, o en una situación no-combativa, en un ritmo que le permita a la fuerza reaccionar a los cambios y completar su misión. La superioridad en la toma de decisiones no es un resultado automático de la superioridad informacional. La adaptación organizativa y doctrinaria, la experiencia y la capacitación relevantes, y los mecanismos adecuados de comando y control son herramientas que son igualmente necesarias. 

La evolución de las tecnologías de la información nos permitirán cada vez más integrar las formas tradicionales de operaciones informacionales con inteligencia sofistica de todo tipo de fuentes, vigilancia y reconocimiento en una campaña informacional totalmente sincronizada. El desarrollo bajo la etiqueta de red global de información aportará el entorno centrado en las redes requerido para lograr esta meta. La red será el conjunto totalizador [end-to-end en el original, N. del T.] de las capacidades informacionales, procesos asociados y gente para administrar y proveer de información según lo demanden los combatientes, los políticos y el personal de apoyo. Aumentará el poder de combate y asimismo contribuirá al éxito de las operaciones militares no-combativas. El logro de todo el potencial de esos cambios requiere no sólo de mejoras tecnológicas, sino también de la evolución continuada de organizaciones y de la doctrina, así como del desarrollo de un capacitación relevante para mantener una ventaja comparativa en el ámbito informacional.
También debemos recordar que la superioridad informacional no significa información perfecta, ni la eliminación de la neblina de guerra. Los sistemas de información, los procesos y las operaciones añaden sus propias fuentes de fricción y de niebla al entorno operativo. La superioridad informacional es fundamental para la transformación de las capacidades operativas de la fuerza conjunta. La fuerza conjunta del año 2020 usará información y conocimiento superirores para lograr la superioridad en la toma de decisiones, para apoyar las capacidades de comando y control avanzadas, y para alcanzar el desarrollo de todo el potencial de la maniobra dominante, el combate de precisión, la protección en todas las dimensiones y la logística dirigida. La amplitud y el ritmo de esta evolución demandan flexibilidad y una disposición hacia la innovación. 

INNOVACIÓN 

Visión Conjunta 2010 identificó la innovación tecnológica como un componenete vital de la transformación de la fuerza conjunta. A lo largo de toda la era industrial, los Estados Unidos han dependido de su capacidad para la innovación tecnológica para el éxito en las operaciones militares, y la necesidad de seguir haciéndolo continuará existiendo. Sin embargo, es importante ampliar nuestro enfoque más allá de la tecnología y aprehender asímismo la importancia de la innovación organizativa y conceptual. 

La innovación, en su forma más simple, es la combinación de nuevas "cosas" con nuevas "maneras" de llevar a cabo las tareas. En realidad, ésta puede resultar de la configuración de cosas completamente nuevas, o la recombinación imaginativa de cosas viejas en formas nuevas, o de algo intermedio. Las ideas de VC 2010 tal y como son desarrolladas en VC 2020, son sin duda innovativas y forman una visión para integrar la doctrina, las tácticas, la capacitación, las actividades de apoyo, y la tecnología en nuevas capacidades operativas. Las innovaciones que determinan las capacidades conjuntas o de los Servicios resultarán de una comprensión general acerca de cómo serán los futuros conflictos y las operaciones militares, y una visión de lo que deben hacer los comandos de combate y los Servicios en orden de llevar a cabo las misiones asignadas. 

Un proceso de innovación efectivo requiere del aprendizaje continuo - un medio de interacción e intercambio que evalúe las metas, las lecciones operativas, las maniobras, los experimentos y las simulaciones - y eso debe incluir mecanismos de retroalimentación. Los Servicios y los comandos de combate deben permitir a nuestros altamente capacitados y calificados profesionales la oportunidad de crear nuevos conceptos e ideas que puedan conducir a grandes adelantos en el futuro. Debemos fomentar las innovaciones necesarias para crear la fuerza conjunta del futuro - no sólo con decisiones que tengan en cuenta la estructura de la fuerza y los presupuestos financieros presentes contra los futuros, sino también con una tolerancia razonable hacia los errores y fallos en el proceso de experimentación. Debemos preocuparnos por el uso eficiente del tiempo y los recursos y crear un proceso que nos dé confianza en que nuestros resultados producirán éxitos en en campo de batalla. Sin embargo, un porceso de experimentación con poca tolerancia hacia los errores hace poco probable el que la fuerza pueda identificar y alimentar los aspectos más relevantes y productivos de los nuevos conceptos, capacidades y tecnología. Todos los individuos y organizaciones encargadas de la experimentación en apoyo a la evolución de nuestras fuerzas de combate deben asegurarse de que nuestra preocupación natural por la administración de los recursos y en última instancia, presentar resultados exitosos, no nos impedirán el buscar innovaciones de potenciales efectos dramáticos aunque inciertos. 

Por supuesto, hay un alto grado de incertidumbre inherente a la búsqueda de innovaciones. La clave para sobrevivir con esa incertidumbre está en el liderazgo audaz apoyado por toda la información posible. Los líderes deben evaluar la eficacia de las nuevas ideas, los inconvenientes potenciales de los nuevos conceptos, las capacidades de los adversarios potenciales, los costos contra los beneficios de las nuevas tecnologías, y las implicaciones organizativas de las nuevas capacidades. Deben hacer esas valoraciones en el contexto de un análisis en desarrollo de los factores económicos, políticos y tecnológicos de un entorno de seguridad anticipada. Cada una de esas valoraciones tendrá una incertidumbre asociada a ella. Pero las mejores innovaciones ha menudo han venido de gente que ha tomado decisiones a pesar de la incertidumbre y la información limitada. 

Al crear innovaciones, los comandos de combate y los Servicios tambien crean sus mejores oportunidades para sobrellevar el aumento en el ritmo de los cambios en el todo el entorno en el que funcionan. A pesar de que los cambios tecnológicos son una fuerza primaria de los cambios en el entorno, no son la única. La búsqueda de innovaciones debe abarcar todo el contexto de las operaciones conjuntas - lo que significa que las Fuerzas Armadas deben explorar cambios en la doctrina, la organización, la capacitación, el liderazgo y la educación, el personal y las facilidades así como en la tecnología. Por último, la meta es la de desarrollar enfoques responsables con la suficiente flexibilidad de recuperación de los errores y de las circinstancias imprevistas. 

4. La Conducción de las Operaciones Conjuntas 

Las complejidades del futuro entorno de seguridad demandan que los Estados Unidos estén preparados para enfrentar una amplia gama de amenazas de variados niveles de intensidad. El éxito en cotrarrestar esas amenazas requerirá de la integración habilidosa de las competencias centrales de los Servicios en una fuerza conjunta hecha a la medida de la situación y los objetivos específicos. Los comandantes deben recibir la oportunidad de lograr el nivel de eficiencia y sinergia necesaria para llevar adelante operaciones decisivas a lo largo de todo el espectro de las operaciones militares. Cuando las operaciones de combate así lo requieran, deben tener un abrumador conjunto de capacidades a su disposición para conducir operaciones ofensivas y defensivas contra el cual un enemigo tenga que defenderse. Otras contingencias complejas, tales como la ayuda humanitaria o las operaciones de paz requerirán de una respuesta rápida y flexible para logar los objetivos nacionales en el lapso de tiempo requerido. Algunas situaciones podrán requerir de las capacidades de sólo uno de los Servicios, pero en la mayoría de los casos, se empleará una fuerza conjunta, tanto de Componentes Activos y de Reserva. 

La complejidad de las futuras operaciones también requiere que, además de operar conjuntamente, nuestras fuerzas tengan la capacidad de participar efectivamente como un elemento de un esfuerzo unificado de acción nacional. Este enfoque integrado descansa en el uso de todas las herramientas del estadista para alcanzar nuestros objetivos nacionales, unilateralmente cuando sea necesario, al tiempo que en el hacer un uso óptimo de las habilidades y los recursos provistos por las fuerzas militares multinacionales, las organizaciones regionales e internacionales, las organizaciones no-gubernamentales y las organizaciones voluntarias privadas cuando sea posible. La participación de la fuerza conjunta en operaciones de apoyo a las autoridades civiles, también aumentará en importancia debido a las amenazas emergentes al territorio de los EEUU, tales como el terrorismo y las armas de destrucción masiva. 

LA GENTE 


El núcleo de la fuerza conjunta del año 2020 continuará siendo una Fuerza Totalmente Voluntaria compuesta de individuos de excepcional dedicación y habilidad. La calidad de los mismos será más importante que nunca en la medida que nuestros miembros del Servicio confronten una diversidad de misiones y de demandas tecnológicas que demanden adaptabilidad, innovación, juicio preciso, pensamiento adelantado y comprensión multicultural. La Nación continuará dependiendo de individuos talentosos de carácter excepcional, cometidos a una ética de servicio desinteresado. 

Nuestra gente requerirá de una multitud de habilidades. Los Servicios jugarán un papel crítico en el perfeccionamiento de sus especialidades individuales y en las competencias centrales de cada organización. Además, cada miembro de la Fuerza Total deberá estar preparado para aplicar sus capacidades a una amplia gama de misiones como miembro del equipo conjunto. Nuestros miembros del Servicio deben tener la agilidad mental para hacer la transición de prepararse para la guerra a hacer valer la paz y al combate real cuand sea necesario. El comandante de la fuerza conjunta, por lo tanto, está provisto de una poderosa y sinergética fuerza capaz de dominar a lo largo de todo el espectro de operaciones. 

Las misiones del año 2020 demandarán miembros del Servicio que puedan crear y luego sacar ventaja de las innovaciones tecnológicas e intelectuales. Los individuos enfrentarán el reto de responsabilidades significativas en los niveles tácticos de la organización y deberán ser capaces de tomar decisiones con implicaciones tanto tácticas como estratégicas. Nuestra visión de dominación de espectro total y la transformación de las capacidades operativas tiene significativas implicancias para la capacitación y la educación de nuestra gente. Las tácticas de las operaciones informacionales, la coordinación de las operaciones multinacionales e inter-agencias, así como la complejidad de las herramientas modernas de guerra requieren de gente que sea tanto talentosa como capacitada en estándares de excelencia. Las operaciones rápidas y dispersas requerirán de hombre y mujeres que sean parte de un equipo cohesionado, y sin embargo sean capaces de ooperar independientemente para satisfacer las intenciones de la comandancia. La evolución de nuevas áreas funcionales, tales como las operaciones espaciales y las operaciones informacionales, requerirán del desarrollo de oportunidades apropiadas de ascenso y liderazgo para los especialistas en esos campos. La acumulaciónde capacitación y experiencia creará una fuerza lista para desplegarse rápidamente acualquier punto del planeta y operar efectivamente. 

La fuerza conjunta del año 2020 enfrentará una cantidad de retos en el reclutamiento y la retención de la gente destacada para cumplir con esos requerimientos. Primero, la expansión de la educación civil y las oportunidades de empleo reducirán el número de candidatos disponibles para el servicio militar. Continuaremos centrándonos en los niveles de vida de nuestros miembros y en una estrategia competitiva de compensación que nos asegure extraer los individuos de calidad que necesitamos. Segundo, el número en aumento de miembros con dependientes requere de un compromiso con programas de apoyo comunitario orientados a la familia y de la mayor estabilidad posible, así como monitorear de cerca el impacto del ritmo de las operaciones. Finalmente, el incremento de nuestra de dependencia del Componente de Reserva requerirá de nosotros el encargarnos de las perocupaciones de nuestros miemmbros reservistas y sus empleadores en lo que tiene que ver con el impacto sobre las carreras civiles. El Departamento de Defensa debe enfrentar directamente esos retos. 

Las operaciones militares continuarán demandando de una dedicación y un sacrificio extraordinarios en las condiciones más adversas. Nuestra Fuerza Total, compuesta de profesionales armados de coraje, energía e intelecto, será exitosa a pesar de la complejidad y el ritmo de las operaciones futuras. 

INTEROPERABILIDAD 

La interoperabilidad es la base de las operaciones multinacionales e inter-agencias efectivas. La fuerza conjunta ha hecho progresos significativos hacia el logro de un nivel óptimo de interoperabilidad, pero debe haber un esfuerzo concertado hacia el mejoramiento continuo. Las mejoras adicionales incluirán el refinamiento de la doctrina conjunta así como el posterior desarrollo de tecnologías y procesos comunes. Maniobras, intercambios de personal, acuerdos sobre procedimientos operativos estandarizados, capacitación y educación individuales, y la planificación reforzarán e institucionalizarán aún más esas capacidades. La interoperabilidad es un mandato para la fuerza conjunta del año 2020 - especialmente en términos de comunicaciones, artículos de logística comunes, e intercambio de información. Los sistemas de información y equipamiento que permitan una imagen oprativa común relevante deben funcionar a partir de redes compartidas a las que pueda acceder cualquier participante con el permiso apropiado. 

Aunque la interoperatibilidad técnica es esencial, no es suficiente para asegurar operaciones efectivas. Debe haber una concentración en los elementos procedurales y organizativos, y los que toman decisiones a todos los niveles deben comprender las posibilidades y limitaciones de los demás. La capacitación y la educación, la experiencia y las maniobras, la planificación cooperativa, y un hábil trabajo de enlace a todos los niveles de la fuerza conjunta, no sólo superarán las barreras de la cultura organizativa y de las prioridades encontradas, sino que enseñará a los miembros del equipo conjunto a apreciar todo el espectro de las capacidades del Servicio a su disposición. 

La fuerza conjunta del futuro tendrá las tecnologías integradas [embedded technologies N del T] y las estructuras organizativas adaptativas que permitan a la gente capacitada y experimentada el desarrollar procesos y procedimientos compatibles, participar en la planificación colaborativa, y adaptarse según las necesidades a situaciones específicas de crisis. Estos rasgos, no sólo son vitales para la fuerza conjunta, sino también para las operaciones multinacionales e inter-agencias. 

Operaciones Multinacionales 

Operaciones Multinacionales – Un término colectivo que describe las acciones militares conducidas por fuerzas de dos o más países, por lo general emprendidas en el marco de una coalición o alianza. (JP1-02) 

Dado que nuestros potenciales aliados multinacionales tendrán variados niveles de tecnología, es necesario un enfoque específicamente diseñado de interoperabilidad que dé lugar a una amplia gama de capacidades. Nuestros aliados más avanzados técnicamente tendrán sistemas y equipos que serán compatibles en lo fundamental, permitiéndoles interactuar e intercambiar información con el fin de operar efectivamente con las fuerzas de los EEUU a todos los niveles. Sin embargo, también debemos ser capaces de operar con aliados y socios de coaliciones que podrían ser tecnológicamente incompatibles - especialmente en el nivel táctico. Adicionalmente, muchos de nuestros futuros socios tendrán capacidades significativamente especializadas que pueden ser integradas dentro de un esquema operativo común. Al mismo tiempo, la existencia de esas relaciones no implica el acceso a información irrestricta. Nosotros y nuestros socios multinacionales continuaremos haciendo uso del sano juicio en lo que respecta a la protección de información sensible, así como de las fuentes. 

En todos los casos, el comando y el control efectivos son los medios primordiales de extender exitosamente la visión conjunta a las operaciones multinacionales. Los desarrollos tecnológicos que conectan a los sistemas de información de nuestros socios proveerán los vínculos que nos lleven a una imagen operacional común relevante y mejoren el comando y el control. Sin embargo, el compartir la información necesaria para mantener el ritmo de las operaciones multinacionales integradas también descansa grandemente en una comprensión compartida de los procedimientos operativos y de las organizaciones compatibles. El comandante debe tener la habilidad de evaluar la información en su contexto multinacional. Ese contexto sólo puede ser apreciado si el equipo del comandante tiene a su disposición suficiente pericia regional y capacidades de enlace. Debe establecerse y mantenerse una comprensión profunda de las características culturales, políticas, militares y económicas de la región. El desarrollo de esta comprensión depende de la capacitación y la educación conjuntos, especialmente con los socios claves, y asimismo puede requerir de cambios organizativos. La efectividad de conjunto de la operación multinacional depende, por lo tanto, de la interoperabilidad entre las organizaciones, los procesos y las tecnologías. 

Operaciones Inter-agencias, Coordinación Inter-agencias 

– Dentro del contexto del involucramiento del Departamento de Defensa, la coordinación que tiene lugar entre elementos del Departamento de Defensa y las agencias involucradas del Gobierno de los EEUU, organizaciones no- gubernamentales, organizaciones voluntarias privadas, y organizaciones regionales e internacionales con el propósito de alcanzar un objetivo. (JP1-02) 

El reto primordial de las operaciones inter-agencias es el de lograr la unidad de esfuerzos a pesar de las diversas culturas, intereses en pugna y diferentes prioridades de las organizaciones participantes, muchas de las cuales mantienen su independencia relativa, libertad de acción e imparcialidad. Adicionalmente, esas organizaciones pueden carecer de la estructura y recursos para apoyar extensivas células de enlace o tecnologías integrativas. En este entorno, y en la ausencia de relaciones de comando formales, la fuerza conjunta del futuro debe ser proactiva en el mejoramiento de las comunicaciones, la planificación, la interoperabilidad y el enlace con los potenciales participantes inter- agencias. Esos factores son importantes en todos los aspectos de las operaciones inter-agencias, pero particularmente en el contexto de amenazas directas a ciudadanos e instalaciones en el territorio de los EEUU. La acción inter-agencia cohesionadora es vital para la disuación, la defensa y la respuesta contra tales ataques. La fuerza conjunta debe estar preparada para apoyar a las autoridades civiles en un esfuerzo totalmente integrado para satisfacer las necesidades de los ciudadanos de los EEUU y alcanzar los objetivos especificados por las Autoridades del Comando Nacional. 

Todas las organizaciones tienen recursos de información únicos que pueden contribuir al cuadro común operativo relevante y apoyar la acción unificada. También tienen requerimientos de información únicos. El compartir la información con participantes que tengan la debida autorización y la integración de la información de todas las fuentes es también crucial. Lo que es más importante, a través de la capacitación con potenciales socios inter- agencias, se deben desarrollar enlaces experimentados para apoyar relaciones a largo plazo, planificación colaborativa adelantándose a las crisis, y procesos y procedimientos compatibles. Como en el caso de nuestros socios multinacionales, la interoperabilidad en todas las áreas de interacción es esencial para las operaciones inter-agencias efectivas.

La fogata-Rebelion / Escuela Bolivariana del Poder Popular
prensa_ebpp

DETENER EL ECOCIDIO MINERO

Académicos, intelectuales, movimientos sociales exhortan al Gobierno Nacional a "Detener el Ecocidio Minero..."

Vasta región del Arco Minero del Orinoco
Credito: Web
En un documento que acompañan con su firma, donde exhortan al Gobierno Nacional, titulado, Detener el ecocidio minero en la cuenca del Orinoco es urgente, académicos, intelectuales, ambientalistas, indigenistas, periodistas, defensores de derechos humanos, movimientos sociales…, manifiestan su preocupación sobre las dramáticas e irreversibles consecuencias ambientales que produciría el Arco Minero del Orinoco.  
En el documento señalan: La minería a cielo abierto y el uso de cianuro que ella supone han sido prohibidas en varios países y regiones del mundo, dado que es una de las actividades industriales más agresivas y letales, en términos ambientales, sociales y culturales.
Más adelante agregan: El Arco Minero, cuyos impactos se sumarían a los del  proyecto de la Faja Petrolífera del Orinoco, se desarrollaría en el medio de la cuenca hidrográfica más importante del país, amenazando con secar en una gran proporción y contaminar aún más fuentes de agua vitales para el sostenimiento del  ecosistema  y la vida humana.  
Concluyen diciendo: ¡NO AL ARCO MINERO! ¡SI A LA VIDA, NO A LA MINERÍA! ¡EL AGUA VALE MÁS QUE EL ORO!
Proponen además a sumarse a este reclamo señalando: Si Ud. quiere suscribir esta declaración, envíe su nombre (y si desea, alguna adscripción social o institucional) al correo electrónico: aguasiorono@gmail.com

A Continuación el documento completo y la lista de las primeras firmas nacionales :

Detener el ecocidio minero en la cuenca del Orinoco es urgente
Un exhorto al Gobierno Nacional
Un llamado a las defensoras y defensores de la vida, a las organizaciones y movimientos sociales, al pueblo venezolano.

Desde mediados de febrero de este año, en el marco de la llamada Agenda Económica Bolivariana y la activación de los “Motores Productivos”, el gobierno nacional ha decidido poner definitivamente en marcha la megaminería en Venezuela, a una escala nunca antes vista.

Uno de los proyectos bandera de esta nueva expansión del extractivismo es el Arco Minero del Orinoco, anunciándose con orgullo un proyecto que implica la apertura a unas 150 compañías internacionales, de un vasto territorio de más de 111.000 kms2, el doble de la superficie correspondiente a la Faja Petrolífera del Orinoco y con una extensión equivalente a todo el territorio de Cuba o de Bulgaria.

Bajo acuerdos muy flexibles y favorables para las compañías transnacionales, y basado en la liberalización y desregulación de zonas completas contempladas como “Zonas Estratégicas de Desarrollo Nacional”, se está impulsando la megaminería a cielo abierto de oro, diamantes, coltán, entre otros, en una zona caracterizada por  un delicado equilibrio  ecológico, de gran importancia  para el desempeño  integral de la vida en el país.

La minería a cielo abierto y el uso de cianuro que ella supone han sido prohibidas en varios países y regiones del mundo, dado que es una de las actividades industriales más agresivas y letales, en términos ambientales, sociales y culturales. Eso lo ha reconocido el propio Ministerio del Ambiente venezolano cuando se le revocó la concesión a la minera canadiense Gold Reserve Inc. en el año 2009. EN LOS ANTECEDENTES DE ESTE TIPO DE EXPLOTACIONES NO FIGURAN CASOS EN LOS QUE NO SE HAYAN CAUSADO SEVEROS DAÑOS SOCIOAMBIENTALES IRREVERSIBLES. NO EXISTE LA MEGAMINERÍA “AMIGABLE CON EL AMBIENTE”.

La enorme remoción de la capa superficial de tierra que provoca esta minería, amenaza con una severa depredación de importantes y delicadas áreas naturales, como por ejemplo las Reservas Forestales del Imataca o del Caura. Las cantidades de agua dulce usadas para obtener solo un gramo de oro superan con creces a otras actividades industriales y agroindustriales. Son conocidos los crecientes problemas de contaminación y acceso al agua de la región norte de Venezuela, que junto a la creciente situación de inestabilidad climática y vulnerabilidad energética, como la que atraviesa la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar en estos  momentos, se verían agravados por el incremento de la minería. 
El Arco Minero, cuyos impactos se sumarían a los del  proyecto de la Faja Petrolífera del Orinoco, se desarrollaría en el medio de la cuenca hidrográfica más importante del país, amenazando con secar en una gran proporción y contaminar aún más fuentes de agua vitales para el sostenimiento del  ecosistema  y la vida humana.  

De llevarse a cabo lo acordado por el gobierno para el Arco Minero, varios pueblos indígenas se verían seriamente vulnerados. En la actualidad, los ye´kuana y sanemá en la cuenca del río Caura, o los warao en el Delta del Orinoco, por mencionar sólo algunos, padecen los efectos de la contaminación con mercurio, enfermedades y agresiones por parte de diversos actores, producto de la minería ilegal. También se ven afectados los e'ñepa, kari'ña, pemón, mapoyo, wotjüja, y yabarana entre otrosUna escala mayor de actividad minera podría generar la destrucción de sus bases materiales de vida, su desarraigo, la violación de sus derechos humanos y, en última instancia, su desaparición.  Por ello consideramos la necesidad de difundir  un alerta al respecto.
La vida en Venezuela, incluso en las ciudades, es posible gracias a sus fuentes de agua, a sus ciclos hídricos, a su biodiversidad y a su complejo y delicado entramado ecológico. La enorme devastación ambiental que conlleva el proyecto del Arco Minero del Orinoco tendría un impacto tremendo sobre ella.

La imposición de este enorme sacrificio sobre la vida social y natural se plantea en nombre de la “estabilización económica”, el “desarrollo” y la “diversificación” de la economía. Sin embargo, este proyecto refuerza el carácter rentista y extractivista de la economía venezolana, incrementando sus niveles de dependencia y vulnerabilidad, nuestra sumisión al capital foráneo, y alejándonos de la construcción de un modelo de economía sostenible, inclusivo y centrado en la vida.

Esta declaración es un llamado de atención y una convocatoria ante el peligro que se cierne sobre nuestro país derivado de los planes  de expansión minera. Estamos ante una oleada sin precedentes de mercantilización de la naturaleza. NOS MANIFESTAMOS EN CONTRA DE ESTE PROYECTO ECOCIDA Y ETNOCIDA.

Adherimos a lo ya expresado por algunas personalidades y organizaciones populares en el sentido de realizar todas las acciones conducentes a la INTRODUCCIÓN DE UN RECURSO DE AMPARO PARA DETENER ESTE PROCESO DE ACTIVACIÓN DEL ARCO MINERO DEL ORINOCO. Exhortamos a la demarcación de tierras de todos los pueblos indígenas del país, como lo consagra la constitución, y clamamos por el respeto de las figuras existentes de protección de áreas naturales en las cuales se ESTABLECE UNA PROHIBICIÓN PERMANENTE DE LA MINERIA.

Exigimos a las autoridades que se saquen a la luz pública los contenidos de los convenios mineros firmados o por firmar.
Apoyamos y exhortamos a la difusión y despliegue de una campaña de información a toda la población venezolana para que esta conozca las particularidades, riesgos y consecuencias de la megaminería.

Invitamos a la organización y movilización de la ciudadanía en torno a las exigencias y compromisos de participación democrática y protagonismo que deben acompañar la construcción de consensos sociales sobre las conveniencias y/o inconveniencias de la opción minera.

Apoyamos la promoción de un Foro Nacional sobre minería y nos manifestamos  a favor de la multiplicación y difusión de amplios debates sobre el modelo de sociedad que queremos, así como la sistematización de propuestas y alternativas que existen, y que están vinculadas a políticas públicas de estímulo a la agricultura en diversas escalas, usos diferentes de las reservas naturales, como el turismo sustentable, proyectos de energías sostenibles, o una nueva arquitectura de distribución de las rentas que reconozca la diversidad cultural  y que tenga un sentido de justicia social y ambiental, entre varias propuestas más.
La defensa de la vida y el ambiente son una obligación de Estado, y es un derecho y un deber de todas y todos los venezolanos, consagrado en la Constitución de la República (arts. 127, 128 y 129).

Decimos ¡NO AL ARCO MINERO!
¡SI A LA VIDA, NO A LA MINERÍA!
¡EL AGUA VALE MÁS QUE EL ORO!

Si ud. quiere suscribir esta declaración, envíe su nombre (y si desea, alguna adscripción social o institucional) al correo electrónico: aguasiorono@gmail.com

Primeras firmas Nacionales
  1. Dr. Esteban Emilio Mosonyi, Rector de la Universidad Nacional Experimental Indígena del Tauca
  2. Ana Elisa Osorio, Ex Ministra del Ambiente
  3. Edgardo Lander, Universidad Central de Venezuela
  4. Lusbi Portillo, Sociedad Homo et Natura
  5. Francisco Javier Velasco, antropólogo y ecólogo social
  6. Víctor Álvarez, Premio Nacional de Ciencia
  7. Santiago Arconada Rodríguez, Universidad Nacional Experimental Indígena del Tauca
  8. Emiliano Teran Mantovani, Universidad Central de Venezuela, ICTA-UAB
  9. Lenin Cardozo, Fundación Azul Ambientalistas
  10. Ronny Velásquez, antropólogo/ Universidad Central de Venezuela
  11. Atenea Jiménez, Red Nacional de Comuneros y Comuneras
  12. Nelson Muñoz, Frente de Resistencia Ecológica del Zulia (FREZ)
  13. Marea Socialista
  14. Alejandro López González, Centro Socio-Economico del Petroleo y Energías Alternativas, Universidad del Zulia.
  15. Paulino Nuñez, CADTM-AYMA
  16. Humberto Márquez, periodista
  17. Antulio Rosales, University of Waterloo
  18. Carlos Carcione, coordinador del equipo de investigación de Marea Socialista
  19. José Angel Quintero Weir, Wainjirawa
  20. Simón Rendón, Coordinador del Centro Ecológico Social “Bolívar en Martí”
  21. Douglas Bravo
  22. Oly Millán Campos, Plataforma para la Auditoria Pública y Ciudadana
  23. Tariana Salazar, Instituto de Estudios Avanzados / Red Nacional de Comuneros
  24. Asamblea de Militantes
  25. María Suárez Luque, Fundación Temendauí de la Amazonía Venezolana
  26. Aquarela del Sol Padilla, escritora/documentalista
  27. Rafael Uzcátegui, Provea
  28. Nicanor Alejandro Cifuentes Gil, Biólogo Universidad Bolivariana de Venezuela / Frente de Resistencia Ecológica del Estado Zulia
  29. Valentina Álvarez Fabro, artista plástica
  30. Liliana Buitrago Arévalo, Investigadora y activista social
  31. María Centeno, arquitecta/artista visual
  32. Marianela Yánez Ontiveros, periodista
  33. Manuel Izaguirre, arquitecto
  34. Juan Carlos La Rosa, Organización Intercultural Wainjirawa, Fundación Indígena para la Educación Propia
  35. Maritza García Larralde, artesana
  36. Argelia Bravo Melet, artista plástica y documentalista
  37. María Antonieta Izaguirre, psicóloga
  38. Daniel Ramírez, urbanista USB/Asamblea de Ciclismo Urbano de Caracas
  39. Mariana Rodríguez
  40. Leonardo Nazoa, matemático/CENDES-UCV
  41. Pedro Sanz, arquitecto
  42. Alejandro Bruzual, Celarg
  43. Ramón Casanova, Profesor investigador, UCV
  44. Elsa Gabriela Rodríguez, socióloga
  45. Stella Jacobs, cineasta
  46. Carlos Bracho, Universidad Bolivariana de Venezuela
  47. Eduardo Carrera, Grupo ambientalista WAKU
  48. Nelson Oyarzábal, antropólogo
  49. Dayaleth Alfonzo, Université d'Avignon – Universidad Bolivariana de Venezuela
  50. Ana Mercedes Carvallo, esmaltista y orfebre
  51. Beatriz M. Bermúdez Rothe, antropóloga
  52. Elizabeth  Zamora, profesora /Universidad Central de Venezuela
  53. Indira Rodríguez, Asistente de Educación Inicial / Grupo Ambientalista Waku
  54. Thairon Martínez, Productor nacional independiente, Guarataro Films.
  55. Patricia Granados, Ingeniero de Producción 
  56. Isabel Alfonzo Ríos, Ingeniero en Energía y Ambiente
  57. Beatriz Pantin
  58. Fresia Ipinza
  59. José Romero Losacco, Universidad Bolivariana de Venezuela
  60. Marx Gómez, Laboratorio de Ecología Política del Centro de Estudios de la Ciencia (IVIC)
  61. Marhylda Victoria Rivero Corona, Laboratorio de Ecología Política del Centro de Estudios de la Ciencia (IVIC)
  62. Manuela Blanco, antropóloga y cineasta
  63. Diana Ovalles, Periodista/Colectivo Panacuate/Las Vainas son Verdes
  64. Cristóbal  Alva, periodista/colectivo Panacuates
  65. Marianela Tovar, historiadora Universidad Central de Venezuela
  66. Delia Polanco, Docente-Investigadora Facultad de Agronomía, UCV
  67. Yolanda Serres Voisin, docente investigadora
  68. Dr. Marcos Rosa-Brussin, Profesor Titular, Jubilado de la UCV, FÍsIco Química, Petróleo y Petroquímica, y Ambiente
  69. Nereida Carrión, Profesor Titular Jubilado de la UCV, Dra. Química analítica, investigadora  en Ambiente
  70. Gabriel Gil, Campaña Venezuela libre de Transgénicos
  71. Gloria Iraima Mogollón Montilla, Docente investigadora Universidad Central de Venezuela, Especialidad Lingüística y Literatura
  72. Cariaco (Colectivo Amplio para la Retoma e Investigación de la Agricultura Campesina y Originaria) 
  73. Daniel Gil Rosado, músico
  74. Dra. Tibisay Pérez, Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC)
  75. León Moraria, Escritor/Vanguardia Antiminera    
  76. Jorge Ernesto Rodríguez Rojas, Profesor Titular, Facultad de Ciencias y Tecnología, Universidad de Carabobo 
  77. Pedro Ortega Osuna, Dr. en Química
  78. Leonor Fernández, PDVSA GAS 
  79. Enrique Rey Torres, sociólogo/CELARG
  80. Tania Abreu Petkoff, Colectivo EcologArte
  81. Elías Capriles, Profesor jubilado de filosofía, Universidad de los Andes (ULA)
  82. Francisco Javier Ruíz Marfil, Centro de Estudios de las Transformaciones Sociales, Ciencia y Conocimientos del IVIC
  83. Francia Medina, Antropóloga, Escuela de Antropología, Universidad Central de Venezuela
  84. Livia Vargas-González, profesora universitaria Sociología-UCV.
  85. Rongny Sotillo, comunicador visual
  86. José Luis Revete, educador    
  87. Vladimir Aguilar Castro, Universidad de Los Andes, Grupo de Trabajo sobre Asuntos Indígenas (GTAI)
  88. María Victoria Canino, Socióloga, Laboratorio de Ecología Política del Centro de Estudios de la Ciencia (IVIC)
  89. Nayralda Lobo, Comunicadora Social, Laboratorio de Ecología Política del Centro de Estudios de la Ciencia (IVIC)
  90. Vera Sanoja Zerpa, Socióloga, Laboratorio de Ecología Política del Centro de Estudios de la Ciencia (IVIC)
  91. José Miguel Cruces, Biólogo (UNESR)
  92. María Angela Petrizzo, Colectivo Comunalizar Conocimiento
  93. Marianicer Figueroa, Colectivo Comunalizar Conocimiento
  94. Nury León
  95. Proyecto Génesis 2001
  96. Alejandro Ochoa Arias, ULA
  97. Francisco Tiapa Blanco, ULA
  98. Pedro Rivas, ULA
  99. Lourdes Contreras Dávila, Universidad Politécnica Territorial de Mérida Kleber Ramírez (UPTMKR)
  100. Myriam Anzola
  101. Dania Roa
  102. Colectivo Kinkalla Visual
  103. Darwin Suarez Bustamante, Sociólogo
  104. Maria de los Angeles Querales, Publicista
  105. Ángela Rodríguez Torres, OJOS ILEGALES Audiovisuales
  106. Francisco Elias Prada, OJOS ILEGALES Audiovisuales
  107. Francisco Issa, Colectivo La Mancha
  108. Oscar Sotillo, Colectivo La Mancha
  109. Janette Rodríguez, Colectivo La Mancha
  110. Dayana Lopez Villalobos, Colectivo La Mancha
  111. Gastón Fortis, Colectivo La Mancha
  112. César Santana, Colectivo La Mancha
  113.  Jouseline Rodríguez, Colectivo La Mancha
  114. Leila Medina, Colectivo La Mancha
  115. Roger Altuve, Colectivo La Mancha
  116. Luis Méndez, Colectivo La Mancha
  117. Sandra Velásquez, Colectivo La Mancha
  118. Magda Meneses, Colectivo La Mancha
  119. Luisa Herrera, Colectivo La Mancha
  120. Petra Meneses, Colectivo La Mancha
  121. Yakeline Rodríguez, Colectivo La Mancha
  122. Juan Carlos Sotillo, Colectivo La Mancha
  123. Michael  Urbina, Colectivo La Mancha
  124. Luis Ruiz, Colectivo La Mancha
  125. Moises Mirele, Colectivo La Mancha
  126. Oscar Fernández, Colectivo La Mancha
  127. Pablo Zapata, artista audiovisual
  128. Maria Daniela Torres
  129. Gloria A. Monasterios, Profesora-investigadora UCV y Colegio Universitario de Caracas
  130. Jessica Luna, Estudiante, UCV/UBV
  131. Natasha García Riveiro, Docente de la UNEARTE
  132. Carmen Helena Parés Urdaneta, Fundación OGA
  133. Carmelo Antonio Raydan Ríos, Docente del PFG de Comunicación Social de la UBV
  134. Osvaldo Enrique Peñaloza Acuña, Colectivo Cumbe/UBV
  135. Jenny Gabriela Farías Suárez, Comunicador Social, LUZ/UBV 
  136. Beatriz Pestana Osuna, artista gráfica
Escuela Bolivariana del Poder Popular
@prensa_ebpp