COMUNAS AL MANDO… por ahora en TV



Este 25 de mayo de 2016, en la calle Soledad del barrio El Guarataro de Caracas, nace para todo el país el programa “COMUNAS AL MANDO”, producido por la Red Nacional de Comuneras y Comuneros (RNC), por comunas, movimiento sociales, y organizaciones populares, y está propuesto para ser transmitido dentro de la programación de Alba TV, Ávila TV, Vive TV y Venezolana de Televisión.

Comunas Al Mando visualiza la lucha y construcción comunera, sus procesos creativos y alimentarios, así como la formación desde su sabiduría originaria. Por ello Comunas al Mando es producida en su territorio mostrando sus procesos de gobierno, pero también con invitados de otras regiones o intelectuales que vienen trabajando el tema del gobierno comunal como base del Poder Popular.

“Hay experiencias productivas y creativas exitosas en lo alimentario o manufacturero,  y sabemos que no la quieren y ni la van a mostrar nunca (en TV privada), porque según ellos la producción no es posible sin la participación de empresarios chupa-dólares.” Nos lo dice Atenea Lamont, vocera de la RNC y productora del programa, y más adelante afirmó: “Por eso hoy con Comunas Al Mando haremos escuchar nuestras voces ocultas por matrices de opinión enemigas del proceso comunero, chavista y revolucionario”
Participan en la producción unas 25 personas de distintos colectivos y comunas, con sus propios recursos; en este caso la Comuna Antonio José de Sucre del Guarataro y la Escuela Bolivariana del Poder Popular. Pero el jueves 26/5 será en el sector “La Esperanza”, Buena Vista en la comuna “Un Paso al Frente” de Mamera. Y el viernes 27 la grabación se realizará en el sector La Cumbre de El Portillo de la Comuna “Bolívar y Rodríguez” de Antímano.

“Otro objetivo de Comunas al Mando es enlazar y construir redes entre movimientos y saberes nacionales e internacionales, en este caso, la organización y protagonismo del Pueblo para derrotar la Guerra Económica y construir la forma de gobierno de los Consejos de trabajadorxs y campesinxs” Atenea Lamont se refería a la línea estratégica de la RNC construida teóricamente por Simón Rodríguez, la cual es la Toparquía, la democracia directa de los habitantes del mismo territorio, es decir, la República de los Consejos.

El programa poco a poco saldrá al aire por los canales anteriormente mencionados y estará a disposición por la Red Nacional de Comuneras y Comuneros para cualquier canal de comunicación alternativa que lo desee transmitir.



Red Nacional de Comunerxs / Escuela Bolivariana del Poder Popular

@regpoyer @RNCdeVenezuela @prensa_ebpp 

ENTRE EL BOSQUE Y EL CARBÓN, ME QUEDO CON EL BOSQUE

Joselyn Ariza
La llegada de Hugo Chávez al gobierno estuvo cargada de muchos cambios, ya que él con sus ideales revolucionarios traza nuevos caminos para Venezuela perfilados hacia el socialismo del siglo XXI. Todo ello plasmado en una agenda, definida como Plan Nacional Simón Bolívar 2006 – 2012; y continuado luego con el Plan de la Patria 2013 – 2019. En este último plan se da una evolución metódica donde coloca cinco objetivos históricos, y uno de ellos es “Preservar la vida en el planeta y salvar a la especie humana”; esto se traduce en: construir y avanzar hacia un modelo económico productivo Ecosocialista.
La implementación de este objetivo infortunadamente empieza con una serie de contradicciones entre teoría y práctica. Por un lado se habla del modelo innovador, ecológico y esperanzador que tiene este país suramericano; y por el otro se inician una serie de prácticas depredadoras y explotadoras contra la madre tierra, que no escapan de parecerse al insostenible capitalismo. Reiterando nuevamente así la visión antropocéntrica del humano como centro del mundo y no como parte de él; donde se anteponen las “necesidades humanas”, sin importar las consecuencias ecológicas que estas pueden encaminar.
Estas prácticas son justificadas además por el agotado modelo rentista donde está sumergido el país hace más de 100 años, con la cual la llevan a tomar decisiones desmesuradas. Como por ejemplo lo es la creación de una carboeléctrica en la Sierra de Perijá (Edo. Zulia), contaminando y desplazando a las comunidades indígenas de esas zonas, sin evaluar el impacto ambiental que puede ocasionar.
Y por otro lado, entrando en la agenda coyuntural (marzo 2016), se propone un Plan de Siembra en 100 días, en pleno desarrollo del Fenómeno del Niño, y pronta llegada del Fenómeno de la Niña, es decir, una ardua sequía más una fuerte vaguada. Además utilizando semillas importadas de procedencia híbridas, que no son más que la legitimación del uso de transgénicos; lo cual se coloca como esperanza y solución productiva “las alternativas” de la guerra económica por la que se atraviesa, y no se asume como uno más de los paliativos que se arrojan y que no resuelven el problema estructural.
Seguido de esto, se inicia la estrategia coyuntural de la activación de los 14 motores productivos, donde se propone la explotación del el Arco Minero guayanés, rico en minerales estratégicos y piedras preciosas. Lo que pone nuevamente en jaque y en contradicción, lo que es ahora Ley del Plan de la Patria con su proyecto Ecosocialista. Y por cierto, el líder de la Revolución Bolivariana una vez mandó a frenar su explotación.
En el 2007, mediante un acto con motivo de la recuperación del Complejo Industrial del Edo. Anzoátegui el Comandante Chávez comentó “…entre el bosque y el carbón, me quedo con el bosque, con el río, el ambiente”. Es por esto que seguimos en la búsqueda del carácter ecológico, humanista e integrador del que una vez se habló en el Plan de la Patria 2013-2019. Pero ¿será que este está muerto, o anda de parranda?.



¿IZQUIERDA PERSEGUIDA O IZQUIERDA DORMIDA?

Joselyn Ariza
Para nadie es un secreto que los gobiernos de izquierda históricamente han estado bajo la mirada de la derecha en sus diversas expresiones, y es que tan solo revisar algunos antecedentes donde se puede encontrar regímenes de carácter fascista que han llegado a irrumpir contra ideales zurdos, como los de Adolf Hitler (Alemania), Benito Mussolini (Italia), Francisco Franco (España), Haji Mohammad Suharto (Indonesia)­, Augusto Pinochet (Chile), Rafael Leónidas Trujillo Molina (República Dominicana) y Anastasio Somoza García (Nicaragua).
En la actualidad no se escapa de esto, países como Venezuela (Hugo Chávez, seguido por Nicolás Maduro, Bolivia (Evo Morales), Ecuador (Rafael Correa), Brasil (Luiz Inácio Lula da Silva, seguido por Dilma Rousseff), Uruguay (José Mujica) y Argentina (con la filiación Kichner); han alzado las banderas del Socialismo, razón por la que sus gestiones han sido blanco de incesantes críticas y ataques nacionales e internacionales por parte de una oposición claramente neoliberal que aspira llegar al poder, ejemplo de esto, el reciente triunfo del conservador Mauricio Macri (Argentina). Donde se avecina una nueva oleada de totalitarismo como acaeció en el siglo pasado, quien busca seguir y mantener su hegemónico orden mundial; acechando a todo lo que huela a Revolución.
Sirviendo todo esto para reconfigurar la geopolítica de América, en la cual se deberá reforzar  los nuevos proyectos alzados en los últimos años, como lo son la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), el Mercado Común del Sur (MERCOSUR), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) y Petrocaribe. Mencionados estos como alcances y avances de la izquierda con perspectiva de soberanía productiva, económica y comercial para la región. Entendiendo que en estas confluyen y confluirán países con visiones neoliberales e incluso aliadas al tan mencionado “imperio”; los cuales no dudarán en acorralar a todo lo relacionado con el chavismo.  Es por esto, que se debe dejar aún lado esas dosis de populismo en los discursos (que se han convertido en cliché y no convencen, no liberan) y generar acciones más concretas, que de esos discursos bonitos y retóricos, ya se ha escuchado mucho y actuado poco. Abandonar el papel de la víctima, el que siempre está a la defensiva y pasar a ser el victimario, el que ataca de una vez por todas a su enemigo de clase, el que domina; ya lo de decía Marx “las ideas dominantes, son de la clase dominante”.  Los atavismos del pasado (nos sirven para conocer la historia e ir hacia un “futuro mejor”), pero ¿Cuándo hablaremos del presente? ¿Cuándo dejaremos de ser manipuladores coloniales? ¿Hasta cuándo seremos esclavos(as) modernos(as)?, los pueblos como motor de la historia, tendrán nuevamente la tarea de ser vanguardia y defender sus ideales o esperar a que pase el carro fúnebre y se lleve los restos del fallecido y fracasado “modelo socialista”.