HOMENAJE A CHAVEZ A TRAVÉS DEL BAILE

La sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño, brinda sus espacios para el Gran Homenaje al Comandante Supremo Hugo Chavez. 

La importante y simbólica Sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño recibirá mañana a las 7:00 pm, por primera vez, el ballet De Arañero a Libertador, pieza interpretada por un colectivo de artistas de diversas áreas compuesto por intérpretes, realizadores y productores de diversos estados, aglutinados bajo la figura de Movimiento de Artistas para la Integración del Sur (MAIS).

Esta singular obra en la que participan más de 40 artistas cuenta la historia de Chávez-Pueblo, su niñez, amores, su encuentro con los maestros Bolívar, Rodríguez y Zamora, el nacimiento del proyecto bolivariano y la lucha contra el imperialismo que culmina con una fiesta en celebración de la construcción del Socialismo. Así lo aseguraron Veruscka Cavallaro, María Cristina Rossell, y María Claudia Rossell miembros de la Dirección General del Proyecto, en entrevista para Ciudad CCS.

Lo peculiar de esta obra viene de su raíz, pues nació del dolor colectivo de personas con actividades diversas que se unieron para crear desde el sentimiento que emanó de la partida del Comandante aquel gris mes de marzo de 2013. Momento que marcó el inicio de este sueño.

“Este viaje surgió al calor de ese dolor, de esa perdida incomprensible para nosotros, en ese momento yendo a las colas que se hacían para despedir al Comandante Chávez en capilla ardiente”, dijo la productora María Claudia Rossel.

“Uno de esos días nos llevamos los Cuentos de El Arañero, no sé, acompañándonos en ese dolor, evocándolo también y decidimos hacer de ese dolor una acción creativa y convertir todo eso en una potencia creativa como él lo hubiese hecho, como él nos enseñó a hacerlo”, añadió.

De Arañero a Libertador es entonces una hermosa pieza social creada con total pluralidad por MAIS y un gran grupo de artistas que se sumó a la idea de rendirse un homenaje como pueblo, desde ellos mismos, y que sirva como un pasaje a la reflexión de lo que aún falta por hacer. Es por ello que uno de los retos que se planteó el grupo creador fue el de reflejar en su estética la ética de trabajo revolucionario detrás de la puesta en escena y practicar el legado socialista desde la trinchera del arte.

“La pieza también nos deja el pensar que el proceso no ha terminado, que la construcción del socialismo no ha terminado, que es un proceso continuo, que todavía nos falta mucho por construir, que nos falta mucho por hacer pero que no nos vamos a rendir y venceremos”, agregó Cavallaro, guionista de la obra.

El proyecto, que ha sido autogestionado y cogestionado por el Instituto de Ferrocarriles del Estado (IFE), fue construido en todas sus etapas, idea, guión, coreografías, música y video arte, de forma totalmente colectiva. En ese sentido, creadoras y creadores buscan y apuestan por problematizar el modelo productivo del país como parte de la continuación de la construcción del socialismo.

“Creemos que de forma solidaria, autogestionada y cogestionada podemos impulsar nuestro proceso, Chávez nos enseñó que la primera forma de poder era la capacidad de poder hacer y nosotros creemos que podemos hacerlo en colectivo”, afirmó la productora.

El montaje de la pieza se inició en enero del 2014 y se fue desarrollando “como un acto de resistencia” al intento de desestabilización del país del que la derecha fue protagonista desde el pasado mes de febrero, según indicó Rossel.

Veronica Abreu Roa/  Ciudad Ccs

Prensa escuela bolivariana

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