CULTURA
Caracas, 24 Nov. La zuliana reconocida con el Premio Nacional de Cultura en la mención de Humanidades, Carmen Bohórquez, destacó que más allá de un logro personal, el recibimiento de la distinción es un compromiso moral con la patria y con el pueblo venezolano, quien decidió valorar los 30 años de trayectoria de cada uno de los homenajeados.
"Al recibir el premio uno se ve obligado a hacer un balance entre su vida de creador y lo que se ha hecho por el país. Si ha sido suficiente para el país, porque es este pueblo el que te está entregando el premio", reflexionó la ensayista al momento de recibir el galardón el pasado jueves.
Señaló además, que más allá de significar un motivo más para la "vanidoteca" de cada creador, el premio tiene un carácter social por el hecho de que, a partir de su entrega cada creador se convierte en ejemplo de vida y obra para el resto de los venezolanos.
"No sería honesto darle un significado puramente personal a este premio que te han otorgado porque ya en su propio significado está implícito el carácter social. (...) Refleja el compromiso, es una gran responsabilidad y un gran desafío moral y político en el sentido fundamental de la sociedad", enfatizó la escritora de Francisco de Miranda. Precursor de las Independencias de América Latina y El pensamiento Filosófico Latinoamericano.
Entretanto, la humanista señaló lo que a su parecer debe ser el papel del artista e intelectual con su sociedad: "Siempre he pensado que un artista que no esté comprometido con su tiempo y su realidad es un intelectual inútil para su pueblo, incluso para sí mismo".
Insistió en la necesidad de transformar a la sociedad desde el trabajo creador. "Pienso que el mundo en que vivimos necesita ser transformado para la belleza, el amor, la solidaridad y la paz; que son los valores más sublimes para que el ser humano pueda volver a florecer".
También rescató el valor de las nuevas generaciones en el papel de conversión social, esas que ven en los ganadores como "una forma encomiable de realizarse como venezolanos" y otras sobre quienes descansa el futuro del país: "El destino de la humanidad está en las nuevas generaciones. No habrá otro tiempo ni otra oportunidad", expresó Bohórquez.
El Premio Nacional de Cultura 2010-2012 también reconoció a "Tío Simón" en Música; Audio Cepeda, en el reglón de fotografía; Domingo "El flaco" Álvarez, en arquitectura; el mirandino José Antonio Davila, en artes plásticas; José Alirio Díaz, por su dedicación al cine criollo; Carlos Paolillo, en la categoría de danza; el escritor Francisco Massiani, en Literatura y en la disciplina del teatro recibió el premio el dramaturgo Néstor Caballero.
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